Pre nochevieja.

Los propósitos de este año, referente a las entradas del blog, ha sido imposible cumplirlos. Mi mejor forma de funcionar es ponerme fecha y hora, esa formalidad la heredé de mi padre, así que a partir de enero (intentaré) haré una entrada quincenal recopilando mis labores u otras cosas que vayan surgiendo.
Lo siento, no quería pero esta entrada será otra vez un cúmulo de labores.

Empiezo por un costurero-neceser que me hice, pero que mi querida hija Susan se ha apoderado de él.
Tiene varios departamentos dentro y además de práctico se ha quedado bonito, bueno, a mí me lo parece.

Esta no es una labor mía, pero si provocada por mí, es un organizador de hilos, muy útil, hecho en tablex.

 

Loca de mí, me he metido en otro berengenal, un baltimore organizado por Apliquick. Ya he hecho el primer objetivo, una dalia, bastante trabajo, pero a mí me gustan los retos. Ahora a esperar el segundo bloque.

Aunque ya tengo suficientes cosillas de Navidad me ha tentado hacer un nacimiento en un bastidor. Muy sencillo, solo porner telas haciendo el campo, otras para formar el portal y sobre guata y forro a coser con máquina y guatear. Coser el misterio formado por botones y a montar.

 

Tengo un amigo muy especial, Carmelo, enamorado de las vespas, yo sé que no está perfecta, pero la he hecho con todo mi cariño. Espero que lo disfrute.

Igual parece pasteloso, pero es tan verdad como la vida misma, otra labor para una persona especial, Mari Carmen, agradable, tranquila, servicial, cariñosa, encantadora... Esto no es pago por nada, sólo es una forma de demostrar que está en mi pensamiento.